jueves, 4 de septiembre de 2008

Lejos

No hay como las playas vírgenes en donde todavía no llega toda la urbe, en lo personal me encanta la idea de estar dentro de un boungalow o en una casa de campaña, con una buena hamaca y por supuesto con gente a la que le agrade ese tipo de estancia. Hace un par de fines de semana me fui con mis a disfrutar de un maravilloso viaje así. No saben que padre es acampar en la playa y asar unos bombones a luz de la luna.

1 comentarios:

Anónimo dijo...

Es increíble poder ir a un lugar alejado de todo y cerca de las bellezas naturales